Inspirada en hechos reales, cuenta la historia de Higinio, un republicano que, por haber ocupado un cargo importante en el Ayuntamiento de su pueblo durante la República, fue perseguido por el franquismo. Para evitar su condena, se esconde en su casa, en una especie de trinchera en la que permanecerá 30 años.
Claustrofóbica, angustiosa, para no perder la memoria de nuestra historia. Lo mejor, la maravillosa interpretación de Antonio de la Torre y, sobre todo, de Belén Cuesta.
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